El directorio de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco) manifestó que urge una solución definitiva por parte del Gobierno Nacional por las millonarias deudas con el sector, que ascienden a aproximadamente 2.000 millones de bolivianos. La entidad lamentó que en más de siete meses de gestión, las autoridades no han tenido el interés de apoyar al mejoramiento y estabilización del rubro.
"Si bien entendemos que hay temas de salud, que es inevitable de atención e importante, también debemos recordarle al Gobierno Nacional su responsabilidad de la reactivación de la economía del país, esperamos que por estos medios de prensa podamos expresar nuestra preocupación, ya que la construcción actualmente se ve vulnerada en sus derechos y acosada por sus contratantes por medio de los supervisores que exigen el reinicio de obras", expresa un comunicado compartido en sus redes sociales. Además, no se cancela las planillas de obras concluidas y en ejecución, que datan de hace varios meses y en algunos casos años.
Las preguntas que planteó la Cámara Boliviana de la Construcción fueron qué esperan los diferentes contratantes tanto del Gobierno Nacional, Departamentales y Municipales de las empresas si no les pagan y cómo pretenden que un sector como la construcción pueda reactivarse y trabajar si no les pagan. Estas interrogantes quedan sin respuestas y menos acciones positivas, "ya que lamentablemente y siendo que se han hecho las gestiones necesarias, se han solicitado reuniones en las cuales 'supuestamente' se comprometieron a dar soluciones, además de hacer todo lo posible de que la presidente del Estado atienda a los constructores y coadyuve a las soluciones" indica el texto.
Las interrogantes de los constructores se genera además por las declaraciones de Carlos Schlink Ruiz, viceministro de Tesoro y Crédito Público, quien dijo tácitamente que “El MAS nos heredó un sobregiro de 18500 millones de bolivianos en el TGN”, expresó que ello dificultaba cumplir con el sector privado por proyectos impagos. Según información presentada por la presidenta de la Asociación de Municipalidades de Bolivia (AMB) y concejala Rocío Molina, en declaraciones a los medios explicó que en enero de 2020 los municipios capitales y El Alto recibieron 316,47 millones de bolivianos provenientes de la coparticipación tributaria, en febrero descendió a 239,34 millones, en marzo 231,32 millones y abril 77,53.
"El párrafo precedente hace pensar al directorio de la Caboco que podría sugerir a todo el empresariado privado nacional, revisar las cláusulas de sus contratos que se refieran a respaldos por paralización de obras, recisiones posibles de contratos o en su defecto pedir a los diferentes contratantes que puedan emitir la certificación presupuestaria necesaria a los diferentes contratistas de la existencia y compromiso de pago del total de los contratos en ejecución, por las condiciones actuales que se atraviesan", expone la institución. Declara que la inseguridad jurídica pasada y la actual pone en mayor riesgo la estabilidad y garantía de mantener empleos seguros y empresas con fortaleza económica para apoyar a la reactivación de la economía.
A todo lo descrito, los representantes de las Cámaras Departamentales de la Construcción de La Paz, Cochabamba, Chuquisaca, Tarija, Pando, Oruro, Beni y Potosí, que conforman el directorio de la Caboco, se encuentran preocupados por la falta de respuesta e importancia a lo descrito anteriormente, más aún cuando a solicitud del viceministro de Inversión Pública, Gonzalo Quiroga, se le ha brindado información de las deudas en detalle por departamento. Producto de las mismas se comprometieron a reunirse con el sector para dar el planteamiento y salida a la crisis que viven los empresarios, ya que se tendría un total de 6.600 millones de bolivianos en cuentas para ser trasferidos a las distintas ETA´s (Entidades Territoriales Autónomas) y se puedan honrar los pagos de proyectos en ejecución y proyectos ya concluidos (que ya están siendo utilizados) con acta de entrega definitiva, de los cuales ni siquiera permiten liberar las garantías otro aspecto que pone en mayor riesgo la estabilidad de las empresas.
La entidad también se refirió al Plan Trabajo que pretende crear 600.000 empleos en áreas de construcción y manufactura en Bolivia, como los puestos laborales se generarán a través de la realización de obras, cuestionó con qué presupuesto o recursos se iniciarían. "Estamos seguros que esto será imposible por la crisis económica del sector y la falta de atención para poder, primero, cumplir con las deudas actuales y dar un reinicio de obras acorde a las posibilidades y necesidades de nuestro país, el futuro y el trabajo de más de 470 mil empleos directos y más de un millón con empleos indirectos que no se contemplan en el plan comunicado, se ven en riesgo de mantener su fuente laboral y menos podríamos generar más empleos, por falta de pago por el Gobierno Nacional y subnacionales", agregó.
Asimismo, la Caboco hizo énfasis en los permisos de circulación, documento necesario ya para que los empresarios se muevan en horarios restringidos, para ello y en cumplimiento al D.S. 4245, que en su Artículo 10, parágrafo III, señala “los permisos de circulación en horario restringido para vehículos particulares, serán emitidos por el Ministerio de Gobierno”, lamentablemente se tropieza con la falta de atención a la emisión de estos pedidos.
"Se debe pagar a las empresas constructoras, se debe garantizar los prepuestos, se debe generar seguridad jurídica para los contratos de las obras, y por último se debe poner la atención debida a un sector que ha apoyado a la economía del país y que ahora se siente debilitado. Caso contrario los empresarios deberán revaluar sus posibilidades y necesidades de las formas de demandar las mismas", concluye el comunicado.
Comments